Esto es algo que le dije a la chica que siempre querré

Te voy a odiar toda mi vida. Me voy a acordar de ti siempre y eres la única persona a la que siempre voy a odiar cuando me acuerde de ella. No me voy a acordar de ti en los grandes momentos, o cuando triunfe o cuando esté muy jodido, ahí me acordaré de las personas que tendré a mi alrededor en ese entonces y que estaban al tanto de mi situación. Me acordaré de ti un día cualquiera fregando los platos, o esperando al ascensor, o tropezándome con un escalón, porque estarás ahí de esa forma que tanto odio, como también me tendré que acordar de ir al médico por el resfriado que ya me dura una semana o porque se me ha olvidado sacar la basura hoy. Te odio con todas mis putas ganas. Sólo a ti. Enhorabuena, has conseguido ser única. Tienes ese privilegio de mierda. Por aparecer tan pronto y dejarme cometer tantas estupideces tan propias de aquel niño que era y no dejarme demostrarte que no era estúpido ni estaba loco, que sólo soy un niño, que lo sigo siendo, pero ya he tomado conciencia de ello. Y te odio tanto que no soporto saber que no estás al tanto de mi odio, que necesito que lo sepas, para liberar peso. O igual es sólo para que tu también me odies y compartir ese odio entre los dos. O para que me odies más y prometerte a ti misma nunca odiarme y por ende nunca acordarte de mi. En realidad no eres nada del otro mundo. Quiero decir, para mi sí. Pero no lo eres. Es algo que se me escapa de las manos