Consell del Cent

Una vez leí o escuché algo así como que la primera vez de tu vida que estás enamorado, todo se resume y se expresa a las mil maravillas con un te quiero. Que la segunda vez que lo quieres utilizar el te quiero te sabe a poco porque quieres a esa persona más que a la anterior -y que dijiste por primera vez te quiero- así que la alargas y utilizas un te quiero mucho. Y que cada vez que se sucede la misma situación intentas expresar el sentimiento con mayor fuerza y acabas diciendo cosas como te quiero más que a nada en este mundo. Y cuando te acuerdas del primer te quiero piensas que nada era tan puro y tan verdadero como entonces.
Pero yo creo que en realidad prostituimos esa palabra, escuchándola día tras día en todas partes y en vistas a conseguir algo, no como un fin sino como un medio. Y al final del todo está cuando te encuentras a ti mismo utilizándola como medio y no como fin porque sabes que es una buena forma de conseguir algo. Pero no sabes que es una malísima forma de conseguir algo. Querer no es conseguir.
Y luego después del final y pasados los días, está el que dice que para que un te quiero sea completo la otra persona no puede responder yo también, tiene que decir te quiero.

A saber, que son todo tonterías y pichorradicas.