Lenguas modernas

El silencio de la habitación equipara el dolor en el pecho, son las XX de la madrugada y el dolor es muy fuerte, tan, tan fuerte que estoy por abandonar, pero tengo otro dolor que supera al dolor inicial y lo reduce a polvos pica pica para el pompis. Érase una vez un chico, érase una vez una chica, llámemoslos "el esquadrón, dispuestos a entregar su cuerpo en vida con tal de, bueno, digo yo que con tal de que el dolor tan fuerte que reduce al dolor inicial aumente, de manera considerable, el esquadrón no se entretiene con tonterías, o aumenta de manera considerable o no lo intentan.
Y son eficientes, ya lo creo.
Mientras tanto un chico, con guitarras y chicas con tacones en la cabeza, no los tacones, llega a casa y pela una manzana mientras su madre duerme plácidamente acostada al lado de su nuevo novio que acaba de conocer exactamente hace tres días y todo coincide, sencillamente toda la cosa que no sé como llamar coincide con la de aquel chico con el dolor tan fuerte que reduce el dolor inicial, y el chico con el fuerte dolor lo sabe, sabe que existe más allá de sus cuatro paredes pero a nadie parece importarle, y aún así cada día es mejor -o peor, según se mire- y sus puntuaciones empiezan a subir como la espuma, vamos, que tiene razón y cada día se da mas cuenta de ello.
El chico con el fuerte dolor, llamémoslo General Fiasco -no penséis en el por qué del nombre porque pensar ese tipo de cosas es malo, muy malo- dice para sus adentros: tío, deja que tu madre se acueste con quien quiera, ¿qué más te da? Pero cuando no es la madre del chico cuya madre se acuesta con un hombre primerizo la cosa adquiere ciertos matices y ya es distinto, bueno, es que sea distinto, es que me cago en el esquadrón.

El esquadrón es un grupo de expertos, especializados en ser expertos en manipular y matar, manipular y matar son dos palabras que para ellos no existen por separado, una vez manipulado hay que rematar, matar.
Entrada la noche -la noche no entra, sale de debajo de las sábanas a regañadientes pero ya me entendéis- el esquadrón trabaja, subiendo carbón de la mina en carritos con ruedines pequeños que encajan con los raíles de las vías, y en cuanto ven al General Fiasco -que sí, que soy yo- abanadonan y dejan tareas pendientes porque el General Fiasco es más importante, ya lo creo que es más importante.

Y, ¿qué es lo correcto entre algo y algo que también es correcto?
Apreciate, apreciate, apreciate, apreciate, apréciate, apréciate, apréciate, apreciate, apréciate, apréciate, apréciate, apréciate, apréciate, apréciate, apréciate, aprécite, apréciate, apréciate, apréciate, apréciate, apréciate, apréciate, apréciate, apréciate, apréciate.